El Banco Central de Venezuela dio a conocer los
resultados del Índice Nacional de Precios al Consumidor del mes de octubre. El
resultado fue de 1,7 %, mayor al del mes anterior: 1,6% e inferior al de
octubre del año pasado. La variación anualizada se ubica en 17,9%, inferior a la presentada en octubre de 2011
que fue de 26,9%. La variación anualizada para octubre de este año representa
la variación más baja desde que se calcula el índice a nivel nacional. En
términos acumulados, la inflación para los primeros diez (10) meses del año se
ubica en 13,4%, la más baja para dicho período desde que se calcula el INPC.
De
las trece (13) categorías que conforman el INPC, tres (3) mostraron una
variación mayor al promedio del mes: alimentos y bebidas no alcohólicas (2,6%), bebidas
alcohólicas y tabaco (2,0%) y servicios de educación (de 3,5%). El
resto de agrupaciones presentan variaciones menores a la del mes. Por otra parte, siete (7) categorias se desaceleraron,
cinco (5) registran un comportamiento acelerado y una (1) mantienen el mismo
comportamiento respecto al mes de agosto.Las que desaceleran son: bienes y
servicios diveros (de 0,9% a 0,8%), comunicaciones (de 0,5% a 0,2%), restaurantes
y hoteles (de 1,9% a 1,9%), servicios de
la vivienda excepto telefono (de 0,2% a 0,1%), servicios de educación (de 4,4%
a 3,5%), transporte (de 1,6% a 1,1%) y vestido y calzado (de 0,8% a 0,7%). Las
aceleraciones,corresponden a: alimentos y bebidas no alcohólicas (de 1,9% a 2,6%),
bebidas alcohólicas y tabaco (de 1,7% a 2,0%), equipamiento del hogar ( de 0,9%
a 1.4%), esparcimiento y cultura (de 0,6% a 1,1%), salud (de 1,1% a
1,2%),mientras que alquiler de vivienda se
mantuvo en 1,0%.
Respecto
a las ciudades, cinco (5) presentan una variación mayor al promedio del mes: Barcelona-Pto.La
cruz (2,0%), Barquisimeto (2,0%), Maturín (1,8%), San Cristóbal (2,5%) y
Valencia (1,8%). El resto de ciudades presentan variaciones menores o iguales al promedio del mes. Tras ciudades
mostraron desaceleración respecto al mes anterior: Caracas (de 1,9% a 1,7%), Ciudad
Guayana (de 1,8% a 1,7%) y Mérida (de 1,5% a 1,3%), en el resto de las ciudades
los precios se comportaron de manera acelerada respecto al mes de septiembre. En
términos acumulados, la mayor inflación se registra en Maracay con 15,1%,
superior a la acumulada a nivel nacional y la ciudad con menor inflación
acumulada es Barcelona-Pto.La cruz con 11,1%, menor a la acumulada a nivel nacional.
Por
grupos, se tiene que servicios de educación fue el que mayor variación presentó
por segundo mes consecutivo con 3,5%. En términos anualizados este grupo
presenta la cuarta mayor variación con 21,8%. En términos acumulados, presenta
la segunda mayor variación con 19,9%. El grupo con mayor variación anualizada y
acumulada es bebidas alcohólicas y tabaco con 32,8% y 25,8% respectivamente,
mientras que comunicaciones presenta la menor variación anualizada y acumulada
con 3,3% y 2,5% respectivamente.
En cuanto a los vecinos de
la región se tiene que en Chile la inflación de octubre fue de 0.6% y la
anualizada se ubica en 2,9%. En Colombia fue de 1,16% para octubre, la
anualizada es de 3,06% y la acumulada se ubica en 2,48%.Para Ecuador los
resultados arrojan 0,09% en octubre, 4,94% la anualizada y 4,21% la acumulada.
En Perú fue de -0,10 % en octubre, la anualizada en 3,25% y la acumulada en 2,55%.
Seguimos teniendo una
inflación alta, mayor a la de nuestros pocos socios comerciales. Sin duda, este
año se ha desacelerado pero nada indica que esta desaceleración sea sostenible
y saludable para la economía. De cara al próximo año queda por ver el efecto de
una posible devaluación y el impacto de profundizar los controles de precios.
La ley de costos no podrá aportar mucho más en el mediano y largo plazo, quien
lo crea se equivoca. Así como seguimos teniendo junto a Argentina la inflación
más alta de la región, tenemos inconvenientes en el “clima de negocios”, de eso
hablaremos la próxima semana.
Como es costumbre en esta
época del año, se discute la Ley de Presupuesto para el Ejercicio Fiscal del
año siguiente, es decir, el presupuesto de la nación. Lo de este año no deja de
llamar la atención, a pesar de saberlo, siempre impresiona la ligereza e
irresponsabilidad con la que desde este gobierno elaboran el presupuesto y esta
crítica no tiene que ver en absoluto con los técnicos que trabajan en los
diferentes Ministerios, hacia ellos mi consideración porque tener que
justificar cosas que a todas luces son injustificables es un sacrificio muy
grande.
Para el próximo año
las premisas macroeconómicas del presupuesto son las siguientes: una tasa de
crecimiento real del PIB de 6 %, una tasa de inflación anualizada entre 14 y
16%, un tipo de cambio de 4,30 Bs/$ y precio promedio de exportación de la cesta petrolera de 55
$/barril. Basado en estas premisas desde el gobierno realizarán acciones “encauzadas principalmente a: Continuar con
los programas de inversión a través de las Grandes Misiones: Vivienda, Agro
Venezuela, Saber y Trabajo, con las que se prevé mantener el dinamismo del
aparato productivo” e “Impulsar el desarrollo y fortalecimiento del modelo de producción
endógeno, constituido fundamentalmente por las empresas de producción social,
unidades productivas familiares, cooperativas y demás formas de organización
socio productivas que se constituyan en el seno de la comunidad, como entidades
económicas dedicadas a la producción de bienes y servicios con criterios de
planificación participativa y protagónica”, modernidad pura y dura, esta es
nuestra visión de desarrollo, ¿qué tal?
Las premisas son muy cuestionables,
veamos ¿por qué?: ninguna proyección que haya visto para el próximo año da a
Venezuela una tasa de crecimiento de 6% y ya la mayoría de organismos
internacionales las han hecho públicas, eso no quiere decir que exista alguna
pero el consenso es que la economía venezolana no crecerá más de 5% en el mejor
de los casos. Respecto a la inflación es cuesta arriba creer que se podrá cumplir
esa meta si esperan seguir con los controles de precios, debemos recordar que
la inflación está “represada” y en su momento volverá al curso natural cuando
se aplican este tipo de políticas. El presupuesto no prevé devaluación, pues,
el presupuesto contempla el mismo tipo de cambio, algo que es difícil sostener
con un déficit fiscal como el que se presentará este año. Si bien es cierto, la
cesta petrolera podría mantenerse estable en torno a los 100$/barril para el
próximo año, eso no garantiza que se pueda hacer frente al hueco fiscal que
dejará este año. El precio de exportación de la cesta petrolera está
deliberadamente subestimado, el promedio de los últimos cinco (5) años permite
establecer un precio superior a 55$/barril y así canalizar mayores recursos
hacia las regiones. Adicionalmente, comparto una pregunta realizada por el
profesor Leonardo Vera de la UCV en su análisis sobre el presupuesto: ¿Cómo es que con un ajuste nominal del gasto público del 20%,
el PIB crece 6%?
Con unas premisas tan fácilmente
desmontables no es exagerado afirmar que el ejercicio de presupuesto 2013 es un
saludo a la bandera, lo que reafirma la poca capacidad institucional que
tenemos en el país. Ver a los diputados del PSUV justificar semejante triquiñuela no tiene precio.
En materias claves, se encuentra
que el presupuesto del Ministerio para la educación universitaria representa el
4,7% del presupuesto total y 1% del PIB. El de ciencia, tecnología e innovación
0,7% del total y 0,1% del PIB. El de salud 6,2% del total y 1,3% del PIB. El de
vivienda y hábitat 0,7% del total y 0,2% del total. Revisen cual es el promedio
internacional que se dedica en estas áreas y verán como lo del presupuesto
nacional es una “mamadera de gallo”. Nadie le ha hecho más daño a la economía
nacional en la era democrática de nuestro país que el Dr. Jorge Giordani,
acuérdense de esto.
En la última semana y media
he estado desconectado de la realidad del país, tomándome lo que creo es un
merecido descanso. Hacía falta salir un poco de la rutina y pasar el guayabo
electoral en sana paz, viviendo otro ambiente y colocando cada cosa en su
lugar.
Una de las principales cosas
que me ha llamado la atención del lugar en el que he estado en los últimos días
es la “dinámica ciudadana” que
permite entender por qué unos países están muy bien y otros muy mal. Es un lujo
ver como una sociedad puede crear un valor en torno a la ciudadanía responsable
y el apego a la norma, es decir, generar reglas de juego que sean estables.
Esto es algo que lamentablemente en nuestro país es inexistente. Siempre he
pensado, que si, como sociedad hemos sido incapaces de hacer que la gente
respete un semáforo, mucho menos se aliviará la pobreza ni seremos potencia de
absolutamente nada.
Es increíble ver como en
términos generales la gente se comporta adecuadamente y como las normas se
cumplen. Leer que la consigna de la policía de una ciudad es: “cortesía, profesionalismo y respeto” y
que en efecto se comporta de esa manera es algo que no deja de impresionarme.
Cuando observas ese tipo de detalles, automáticamente piensas ¿qué estaremos
haciendo mal? Luego, cuando ves venezolanos comportándose de manera ejemplar,
inmediatamente dices ¿por qué aquí sí y en Venezuela no?.Responder esta última
pregunta es clave para entender el problema instititucional que vive Venezuela
desde hace muchos años pero que se ha profundizado en la última década y que
tiene consecuencias económicas, políticas y sociales importantísimas para el
país.
No se trata de despreciar el
apego a la norma y dársela de vivo porque así me ve mejor la gente, más bien,
tiene que ver con el hecho de rechazar ese tipo de comportamiento y generar un
valor en torno a cumplir con lo establecido. El lamentable problema que vive el
país en la actualidad no se resuelve a partir de las buenas intenciones, las instituciones
no funcionan y se espera que por obra y gracia del Espíritu Santo, de la noche
a la mañana el país sea otro.
Entender que los hábitos,
costumbres y tradiciones moldean nuestra estructura institucional es un paso
que permitiría entender mejor el problema en el que estamos metidos. No todo se
reduce a lo electoral porque de nada sirve cambiar el pésimo pero popular gobierno
que tenemos si no se entiende que cambiar el país necesita del esfuerzo de
todos y parte de eso pasa por llegar a un acuerdo mínimo de convivencia y de
respeto hacia el otro, esto es: “tú me
reconoces, yo te reconozco, tú me respetas, yo te respeto”.
Conseguir ejemplos de países
con instituciones fuertes y de calidad hace pensar que no todo está perdido,
sin embargo, el camino es largo y muy duro si de verdad se quiere salir del
estancamiento en el que estamos. Lo que vive hoy nuestro país es algo que debe
hacer reflexionar a todos aquellos interesados por mejorar la situación actual
de la sociedad venezolana. No se trata solo de criticar y quejarse, la idea es
proponer y discutir ideas para así configurar el país que necesitamos y
queremos.
Queda claro que los países
que hoy son referencia en el mundo lo han logrado porque sus instituciones
funcionan y existen los incentivos necesarios para que un sistema de pesos y
contrapesos permita balancear los excesos de unos y las debilidades de otros.
Estos días de descanso han
servido para reflexionar sobre lo bueno que podríamos llegar a ser y lo mal que
estamos como sociedad. Es importante tener claro que los gobiernos tienen sus
responsabilidades pero los ciudadanos también tienen las suyas y hasta que cada
uno no se encargue de cumplir con sus deberes y reivindicar sus derechos, allá
lo harán mejor y aquí nosotros estaremos estancados.
Hace aproximadamente un mes se anunció el Premio
en Ciencias Económicas en honor a Alfred Nobel para el año 2012, lo que
comúnmente llamamos el “nobel de economía”. Este año los ganadores son los
norteamericanos Alvin E. Roth y Lloyd S. Shapley por sus contribuciones en la “asignación de recursos y diseño de mercados”. Teóricamente los problemas de asignación de
recursos los resuelve el mercado a través del sistema de precios, por eso, se
afirma que el mercado asigna recursos eficientemente, sin embargo, esto no
siempre es así y el sistema de precio falla en su rol de asignar recursos. En
el documento publicado por la Academia Sueca explicando los aportes de los
autores se señala que “el premio de este
año abarca un marco teórico para el análisis de la asignación de recursos, así
como estudios empíricos para el rediseño
de las instituciones del mundo real como por ejemplo el mercado laboral y los procedimientos de
admisión a las escuelas públicas.”
Los aportes de Roth y
Shapley son herramientas para el rediseño institucional una vez que el mercado
presenta fallas para asignar recursos. Se trataría de diseñar mercados de la
mejor manera posible para que así puedan darse asignaciones eficientes de
recursos. Para lograr realizar sus aportes teóricos y empíricos, los autores utilizaron
la denominada teoría de juegos, una herramienta matemática creada en los años
40 y que se ha hecho muy popular en economía para estudiar el comportamiento
estratégico de los agentes, como por ejemplo, “la guerra de precios”. Es tan utilizada en la disciplina económica
que de acuerdo a mi cuenta, esta sería la cuarta vez en la que se premia
directamente la teoría de juegos como área estudio en problemas económicos. En
1994 el premio fue para John Harsanyi, John Nash y Reinhard Selten por sus
aportes al “análisis de equilibrio en la
teoría de juegos no-cooperativa”. En 2005, lo ganaron Robert Aumann y
Thomas Schelling por sus
aportes en “la comprensión del conflicto
y la cooperación mediante el análisis de la teoría de juegos". En 2007 Leonid Hurwicz, Eric Maskin y Roger
Myerson se hicieron merecedores del premio por “sentar las bases de la teoría del diseño de mecanismos” y este año
Roth y Shapley.
El Nobel de este año corrobora lo que el Profesor Kamal
Romero(@kamromero) de la Universidad Rey Juan Carlos en Madrid me comentó el
día que anunciaron el premio:“cuesta
encontrar un área de teoría económica en la cual no haya un elemento de teoría
de juegos”. En la actualidad la teoría de juegos es de las herramientas más
utilizadas para construir modelos y teorías que permitan explicar
comportamientos económicos. La teoría de juegos no es economía es matemática,
una herramienta muy utilizada en economía pero también en ciencias políticas,
sociología, biología y otras ciencias sociales.
El trabajo de Roth ha sido aplicado al mercado laboral de
cuidados médicos y salud en Estado Unidos, entre ellos, en gastroenterología,
cirugías ortopédicas y donación de riñones. También para el caso de los
procesos de admisión en las escuelas públicas y el comercio electrónico. No en
vano, Roth cuando fue entrevistado desde Suecia por el anuncio del premio dijo
que en efecto, “la economía es sobre el
mundo real”.
La obra de Shapley posiblemente sea de corte más teórico pero
no por ello menos importante, para los académicos que se dedican a la teoría de
juegos el premio para él este año es más que merecido. Tanto así que Robert
Aumann en su discurso Nobel en el año 2005 lo considero como el más grande
teórico de juegos de todos los tiempos. Sí, un premio Nobel diciéndole a
alguien que no lo es “eres mejor que yo”, la verdad eso no es cualquier cosa y
cinco años después la frase de Aumann parece hacer justicia con su trayectoria
intelectual y académica.
El anuncio de este año a muchos los agarró por sorpresa
debido a que la teoría de jugos había sido reconocida recientemente, sin
embargo, los trabajos de Roth y Shapley sin ninguna duda merecen el premio que
les será entregado en diciembre.
El Banco Central de Venezuela dio a conocer los
resultados del Índice Nacional de Precios al Consumidor del mes de septiembre y
por lo tanto del tercer trimestre del año. El resultado fue de 1,6 %, mayor al
del mes anterior: 1,1% e igual a la de agosto del año pasado. La variación
anualizada se ubica en 18,0%, inferior a
la presentada en septiembre de 2011 que fue de 26,5%. En términos trimestrales,
la variación fue de 3,7%, inferior a la del trimestre anterior, 3,8% y a la del
tercer trimestre del año pasado, 6,6%. La variación anualizada para septiembre
de este año representa la variación más baja desde que se calcula el índice a
nivel nacional. En términos acumulados, la inflación para los primeros nueve (9)
meses del año se ubica en 11,5%, la más baja para dicho período desde que se
calcula el INPC.
De
las trece (13) categorías que conforman el INPC, cuatro (4) mostraron una
variación mayor al promedio del mes: alimentos y bebidas no alcohólicas (1,9%), bebidas
alcohólicas y tabaco (1,7%), restaurantes y hoteles (1,9%) y, servicios de educación
(de 4,4%). El resto de agrupaciones presentan variaciones menores o
iguales a la del mes. Por otra parte, cinco (5)
categorias se desaceleraron, siete (7) registran un comportamiento acelerado y una
(1) mantienen el mismo comportamiento respecto al mes de agosto.Las que
desaceleran son: bebidas alcohólicas y tabaco (de 4,9% a 1,7%), bienes y servicios
diveros (de 1,0% a 0,9%), esparcimiento y cultura (de 2,7% a 0,6%), salud (de
1,2% a 1,1%) y transporte (de 1,7% a 1,6%). Las aceleraciones,corresponden a: alimentos
y bebidas no alcohólicas (de 0,5% a 1,9%), alquiler de vivienda (de 0,7% a 1,0%),
comunicaciones (de 0,4% a 0,5%), equipamiento del hogar ( de 0,5% a 0.9%), restaurantes y hoteles (de 1,3% a 1,9%), servicios
de educación (de 0,8% a 4,4%), servicios de la vivienda excepto telefono (de 0,1,%
a 0,2%).Por su parte vestido y calzado se antuvo en 0,8%.
Respecto
a las ciudades, tres (3) presentan una variación mayor al promedio del mes: Caracas
(1,9%), Ciudad Guayana (1,8%) y San Cristóbal (1,7%). El resto de ciudades
presentan variaciones menores al promedio del mes. Es importante destacar que
todas las ciudades mostraron aceleración
respecto al mes de agosto, siendo caracas la de mayor variación y Barquisimeto
la de menor con 1,3%.En términos acumulados, la mayor inflación se registra en
Maracay con 13,2%, superior a la acumulada a nivel nacional y la ciudad con
menor inflación acumulada es Barcelona-Pto.La cruz con 8,9%, menor a la
acumulada a nivel nacional.
Por
grupos, se tiene que servicios de educación fue el que mayor variación presentó
con 4,4%. En términos anualizados este grupo presenta la cuarta mayor variación
con 21,3%. En términos acumulados, también presenta
la cuarta mayor variación en lo que va de año con 15,9%. El grupo con mayor
variación anualizada y acumulada es bebidas alcohólicas y tabaco con 32,2% y
23,3% respectivamente, mientras que comunicaciones presenta la menor variación
anualizada y acumulada con 2,3% y 3,7% respectivamente.
En cuanto a los vecinos de
la región se tiene que en Chile la inflación de septiembre fue de 0.8% (mayor a
lo esperado) y la anualizada se ubica en 2,8%. En Colombia la anualizada es de
3,04% y la acumulada se ubica en 2,32%.Para Ecuador los resultados arrojan 1,12%
en septiembre, 5,22% la anualizada y 4,12% la acumulada. En Perú fue de 0,48 %
en septiembre, la anualizada en 3,74% y la acumulada en 2,66%.
Todo indica que el impulso
de la inflación durante el mes de septiembre se debió al incremento del gasto
público para la campaña electoral. Posiblemente la inflación cierre con un
número menor a la del año pasado pero nada indica que disminuirá
sustancialmente y que sea sostenible en el mediano plazo. La inflación se está
“represando” y en cualquier momento volverá a su nivel. Nuestros vecinos de la
región tienen metas de inflación de un dígito y se preocupan cuando no cubren
la expectativa del mes. Aquí estamos lejos todavía.
Un reciente informe del
Fondo Monetario Internacional (FMI) revela que las reservas de oro de Venezuela
cayeron en agosto de 365,8 toneladas a 362,05 toneladas, mientras que países
como Paraguay y Corea del Sur incrementaron sus posiciones en oro. En lo que va
de año las reservas de oro de Venezuela han caído 10,92 toneladas. El Consejo
Mundial del Oro no registra la caída del mes de agosto, los datos disponibles
de esta organización están hasta el segundo trimestre del año 2012, sin
embargo, si reportan una caída del tercer trimestre del año 2011 al segundo
trimestre del año 2012 en 7,15 toneladas. En dicho período, Venezuela es el
país que mayor descenso de sus reservas en oro presenta: República Checa las
disminuyó en 0,19 toneladas, Alemania en 5,41 toneladas, Sri Lanka en 3,41
toneladas y Taiwan en 0,93 toneladas. Estos son los únicos países que
disminuyeron sus reservas en oro durante dicho período, el resto, las aumentó o
las dejó igual.
De acuerdo al Consejo
Mundial del Oro, para septiembre de este año, Venezuela es el décimo quinto
(15) país del mundo con mayores reservas de oro. Las reservas de oro de nuestro
país representan el 68% del total de sus reservas internacionales, superado por
Portugal (90%), Grecia (82,1%), Estados Unidos de Norteamérica (75,4%),
Alemania (72,3%), Francia (71,7%) e Italia (71,2%). Lo que si reflejan las
cifras del Consejo Mundial del Oro es que durante los dos (2) primeros
trimestres del año el oro como porcentaje de las reservas totales ha disminuido
en 4,7%, solo superado por Ecuador y Suiza, cuyas reservas en oro han disminuido
7,4% y 5% respectivamente. Desde el año 2000 el porcentaje más bajo que el oro
ha representado de nuestras reservas internacionales es 17,1%, durante el
tercer trimestre de ese mismo año y el más elevado, 72,3% durante el primer
trimestre del año en curso. A partir del año 2009 se ve un aumento importante
del peso del oro dentro de nuestras reservas internacionales. Al día de hoy, el
oro como porcentaje de las reservas totales, representa el doble de lo que ha
representado en los últimos once (11) años, es decir, tiene un mayor peso en
las reservas internacionales.
Desde la firma Ecoanalitica
señalan que el nivel en el que se ubicó el oro monetario durante el mes de
agosto es similar al promedio de los últimos cinco (5) años y lo que
preocuparía respecto a las reservas internacionales es la poca disponibilidad
de reservas líquidas y que exista una disminución de reservas de casi 20%
interanual cuando el precio del petróleo se ha mantenido estable desde
septiembre de 2011.Un mayor porcentaje de oro en las reservas internacionales disminuye
la posibilidad de tener reservas líquidas, algo indispensable para desarrollar
el actual modelo económico del gobierno basado en importaciones.
Respecto al oro es
importante señalar que en un país con la actual coyuntura económica y política,
una disminución relativamente importante de la cantidad de oro, despierta
cualquier tipo de suspicacia. Los niveles de reservas líquidas se encuentran,
de acuerdo al último balance del BCV en 2 146 millones de doláres, de un total
de 25 mil 120 millones de dólares, es decir, solo 8,54% de las reservas
internacionales son líquidas. Con este escenario, la disminución de reservas en
oro hace pensar que hay una gran escasez de dólares y que los famosos y
cuantiosos recursos que desde el gobierno han dicho que tienen en diversos
fondos es pura ficción: no existen. Si bien es cierto, la venta del oro
monetario durante este año no represente un gran tema para la coyuntura que
vive el país, deja claro que algo está pasando con la administración de los
recursos y que estos no son tan cuantiosos como dicen desde el gobierno.
Amanecerá y veremos.
La respuesta a esta pregunta
es un contundente SI y la forma de lograrlo es cambiando el modelo, ni siquiera
el gobierno, sino el modelo. Ahora, que el actual gobierno no esté interesado
en cambiar la forma de gestionar la economía es otra cosa.
La economía venezolana
muestra los peores índices de calidad institucional de la región y en materia
macroeconómica su desempeño deja mucho que desear. Nuestro país en los últimos
treinta y cinco (35) años muestra uno de los peores resultados en materia
económica del mundo y en los últimos diez (10) esa dinámica se ha acentuado.
Si, ya sé que hay mucho dinero en la calle, que el venezolano come “más y mejor”
que hace veinte (20) años y que los pobres son “tomados en cuenta”, sin
embargo, ¿es esto suficiente?.
Los logros que muestra el
actual gobierno en materia social y económica son cuestionables,
principalmente, por el costo que estos han generado. Esto quiere decir que todo
lo “logrado” hasta ahora ha podido hacerse a un costo social y económico más
bajo. Un ejemplo de esto es el tema de las expropiaciones, no existe una
relación que permita establecer que las expropiaciones han disminuido la
pobreza o que los trabajadores de las empresas expropiadas están mejor después
que pasaron a manos del Estado. Existirá una que otra particularidad pero pensar
que esa es la vía para disminuir la pobreza es un insulto a la inteligencia de
la gente.
En nuestro país la rendición
de cuentas es un saludo a la bandera y por más tonto que suene es de vital
importancia que exista transparencia en la gestión pública. Lamentablemente, lo
que se ha hecho siempre es entregar una
“Memoria y Cuenta” en clave de acto social para que la ciudadanía crea que se
rinden cuentas. Desde hace mucho tiempo no vemos interpelaciones en el
Parlamento Nacional que exijan aclarar casos importantes del acontecer público.
En la Venezuela actual, parecería pecado exigir investigaciones que lleguen a
conclusiones que permitan responsabilizar a los culpables del desastre que
estamos viviendo como nación.
El manejo de la economía se
ha realizado con criterios de fidelidad a la causa política sin importar ningún
criterio técnico en la toma de decisiones. Así tenemos un control de cambio
draconiano y regulaciones de precios que no obtienen los resultados esperados
porque tienen fallas de origen.
Las expectativas que se
generan con un discurso tan agresivo por parte del gobierno son muy negativas
para la inversión en el país. La inversión extranjera directa ha disminuido a
niveles históricos en los últimos diez (10) años. Los grandes negocios se
garantizan en el sector petrolero, donde sin duda, le dan garantías a las
grandes empresas internacionales para que vengan a invertir. Mientras tanto,
Colombia y Perú ven como las inversiones crecen porque hacen las cosas
correctamente y muchas empresas prefieren ir a esos países que venir al
nuestro.
Paro petrolero aparte, el
sector muestra un desempeño errático y siendo este nuestro principal argumento
para generar riqueza, es urgente mejorar la productividad de la industria
petrolera nacional y eso se hace con inversiones, es la única forma. Es
completamente y absolutamente falso que por estar comprometido con un proyecto
político, en este caso, el revolucionario, la industria petrolera mejorará en
su desempeño. En términos técnicos nada puede demostrar semejante barbaridad.
El compromiso está en hacer cada vez mejor las cosas y ser más productivos; eso
se puede lograr independientemente de las ideas políticas de la gente que
trabaje en la industria.
Con el actual “modelo
económico” no vamos a ninguna parte, el dinero seguirá estando allí y unos
pocos aprovecharán su posición para tener acceso a privilegios. Se trata de
hacer una economía productiva con ideas viables en el mediano plazo que
permitan insertar a Venezuela en el contexto global, no solo del petróleo. El
país tiene potencial y ha llegado la hora de explotarlo. De lo contrario, lo
pagaremos muy caro.
Recientemente el Foro
Económico Mundial publicó los resultados del Reporte Global de Competitividad
2012-2013. Es un estudio que se hace anualmente y estudia doce (12) factores
que influyen en la productividad y competitividad de las naciones. Los factores
son: Instituciones, infraestructura, ambiente macroeconómico, salud y educación
primaria, educación superior, eficiencia en los mercados, eficiencia en el
mercado laboral, desarrollo del mercado financiero, preparación tecnológica,
tamaño del mercado, “sofisticación” de negocios e innovación.
Los resultados se establecen
por cada factor y luego se genera un índice general que permite clasificar a
los países de acuerdo a la puntuación obtenida. En este sentido el reporte
señala: “es importante tener en cuenta
que los factores no son independientes: se refuerzan mutuamente y una debilidad
en un área a menudo tiene un impacto negativo en los demás. Por ejemplo, una
fuerte capacidad de innovación difícilmente se logre sin una vida sana, bien
educada y con una fuerza de trabajo no capacitada y sin financiamiento
suficiente”.
Los resultados muestran que
Venezuela ocupa el puesto 126 entre 144 economías con un puntaje de 3,46 sobre
7 puntos, desmejorando dos (2) posiciones respecto al año anterior. El índice
global se conforma por 3 (tres) subindices a saber: el de requerimientos
básicos, el de factores que estimulan la eficiencia y los factores de
innovación. Respecto a los requerimientos básicos como instituciones,
infraestructura, ambiente macroeconómico y salud/educación primaria, Venezuela
se ubica en la posición 126. En términos de eficiencia de 117 y en innovación
de 135.
El país que lidera el
reporte es Suiza con 5,72 puntos sobre 7 posibles, le siguen Singapur,
Finlandia, Suecia y Holanda. Puerto Rico aparece en la posición 31 y Chile en
la 33, luego viene panamá en la 40 y Brasil en la 48. Países como Uganda,
Etiopia, Senegal, Nigeria, Camerún, Kenya, Ghana y Zambia son más competitivos
que Venezuela.En lo referente al factor institucional nuestro país se ubica en
la posición 144 (último), en infraestructura (120), en ambiente macroeconómico
(126) y salud/educación primaria (84).
Como observan los resultados
no son buenos, una vez más, salimos mal parados en los estudios internacionales
en los que nuestro país es evaluado. La competitividad es importante porque nos
ubica en el contexto global y nos compara con otras economías, muchas de ellas,
sin una gota de petróleo. Lograr un nivel de competitividad óptimo permite
posicionarnos internacionalmente y hacer a la economía venezolana más fuerte y una
referencia en determinados sectores. Como observamos, nada de eso está
ocurriendo y la realidad es que ni en el negocio petrolero-del cual vivimos-
somos productivos y competitivos. El avance logrado por Petrobras de Brasil y
Ecopetrol de Colombia en los últimos años lo corrobora.
Apuntar hacia sectores
estratégicos que tienen posibilidades reales de competir internacionalmente y lograr
una economía competitiva que permita la inserción en el mercado global, tiene
que ser el principal objetivo de cualquier gobierno. Lamentablemente en los
últimos diez (10) años se ha perdido mucho tiempo en discusiones ideológicas
que no hacen a la economía venezolana más competitiva y allí está el detalle:
necesitamos una economía productiva que permita fortalecer al sector privado
para generar empleos de calidad e incentive la innovación. Sin eso, es poco lo
que se puede lograr, por más petróleo que se tenga.
Para los que tienen como único argumento que estos
indicadores son capitalistas y neoliberales, me permito expresarles que si
nuestra economía no mejora y se hace cada vez menos productiva, no podrán
seguir discutiendo “sobre los cambios
profundos y trascendentales que vive
nuestro país con el cambio de modelo que vivimos” o corren o se encaraman
pero a este país hay que echarlo hacia adelante y eso se hace trabajando e
innovando, de lo contrario, no se podrá hacer absolutamente nada
El Banco Central de Venezuela dio a conocer los
resultados del Índice Nacional de Precios al Consumidor del mes de agosto. El
resultado fue de 1,1 %, mayor al del mes anterior: 1,0% y menor a la de agosto
del año pasado, 2,2%. La variación anualizada se ubica en 18,1%, inferior a la presentada en agosto de 2011 que
fue de 25,8%. La variación anualizada para agosto de este año representa la variación
más baja desde que se calcula el índice a nivel nacional. En términos
acumulados, la inflación para los primeros ocho (8) meses del año se ubica en 9,8%,
la más baja para dicho período desde que se calcula el INPC.
De
las trece (13) categorías que conforman el INPC, cinco (5) mostraron una
variación mayor al promedio del mes: bebidas alcohólicas y tabaco (4,9%), esparcimiento y cultura
(2,7%) restaurantes y hoteles (1,3%), salud (1,2%), transporte (1,7%). El
resto de agrupaciones presentan variaciones menores a la del mes. Por otra parte, cinco (5) categorias se desaceleraron,
seis (6) registran un comportamiento acelerado y dos (2) mantienen el mismo
comportamiento respecto al mes de julio.Los que desaceleran son: alquiler de
vivienda (de 1,0% a 0,7%), salud (de
1,6% a 1,2%), servicios de educación (de 2,9% a 0,8%), transporte (de 2,6% a
1,7%) y vestido y calzado (de 1,2% a 0,8%). Las aceleraciones,corresponden a: alimentos
y bebidas no alcohólicas (de 0,2% a 0,5%), bebidas alcohólicas y tabaco (de 2,2%
a 4,9%), comunicaciones (de 0,2% a 0,4%), esparcimiento y cultura (de 1,2% a
2,7%), restaurantes y hoteles (de 1,1% a 1,3%), servicios de la vivienda
excepto telefono (de (0,2,)% a 0,1%). Por su parte bienes y servicios diversos
se mantuvo en 1,0% y equipamiento del hogar en 0,5%.
Respecto
a las ciudades, cinco (5) presentan una variación mayor al promedio del mes: Barquisimeto
(1,2%), Ciudad Guayana (1,3%), Maracay (1,4%), Maturín (1,3%) y Valencia
(1,3%). Adicionalmente, seis (6) mostraron aceleración respecto al mes previo: Barquisimeto
(de 1,0 a 1,2%), Ciudad Guayana (de 1,1% a 1,3%), Mérida (de 0,7% a 0,9%),
Maturín (de 0,9 a 1,3%) resto nacional (de 1,0 a 1,1%) y Valencia (de 1,0 a
1,3%). Caracas y Maracaibo mantuvieron un comportamiento de 1,0% y el resto de
ciudades, presentaron un comportamiento desacelerado.
Por
grupos, se tiene que bebidas alcohólicas y
tabaco fue el que mayor variación presentó con 4,9%. En términos
anualizados este grupo es el que mayor variación presenta: 31,0%. En términos
acumulados, este grupo también presenta
la mayor variación en lo que va de año con 21,3%. El grupo con menor variación
anualizada y acumulada es comunicaciones
con 5,5% y 1,8% respectivamente.
En cuanto a los vecinos de
la región se tiene que en Chile se espera que la inflación en agosto sea de 0.3%. En
Colombia fue 0,04% para agosto, la anualizada es de 3,11% y la acumulada se
ubica en 2,03%.Para Ecuador los resultados arrojan 0,29% en agosto, 4,88% la
anualizada y 2,97% la acumulada. En Perú fue de 0,51% en agosto y 2,17% la
acumulada.
Todo indica que la inflación
se desacelera, lo importante es estudiar la razón de este comportamiento y
entender si se debe a razones que puedan ser sostenibles en el tiempo o algo
coyuntural. Los resultados de la región demuestran que seguimos teniendo la
inflación más elevada y nada indica que podríamos tener una inflación más baja
que nuestros vecinos. Ese punto es importante porque la región vive días de
baja inflación y Venezuela no. Atacar las razones de fondo del comportamiento
de los precios en nuestro país es fundamental, de lo contrario, la gente de
bajo ingresos se verá más afectada por más redistribución del ingreso que
intenten hacer vía subsidios.
En Venezuela el subsidio a
la gasolina tiene rango ministerial. Afirmo esto porque su montal total es
mayor que el presupuesto de muchos ministerios. Para este año, el presupuesto
del ministerio de educación superior representa, aproximadamente, 0,9% del
producto Interno Bruto (PIB) mientras que el subsidio a la gasolina se ubicará
en 4% aproximadamente. Lo mismo ocurre con el presupuesto dedicado a ciencia y
tecnología, nada más y nada menos, por solo mencionar dos (2) ejemplos.
Cuando en un país anualmente
se desembolsa tal magnitud de dinero para un subsidio que solo beneficia a la
gente de mayores recursos, entiendes, que algo no anda bien. Las prioridades
del gobierno de turno no están bien jerarquizadas, con todo el juicio de valor
que esto significa. Sostengo esto porque el subsidio a la gasolina, es un
regalo que el gobierno venezolano le da a las personas que tienen vehículo y
que insólitamente terminan pagando los que menos tienen: aquellos que andan en
transporte público todos los días. Este es un país en el que algunos vehículos
cuestan más que una casa y sus dueños tienen gasolina gratis en términos
reales, ¿es eso lógico?, si, el que más tiene, menos paga. Así es este país
petrolero latinoamericano.
Hace pocos días en una
entrevista conversaba con Henkel Garcia (@HenkelGarcia) Director de la firma
Econométrica y Luis Oliveros (@luisoliveros13) profesor de la UCV sobre este
tema y comentábamos que existe un fuerte sesgo de la población a pensar que por
ser un país petrolero, la gasolina tiene que ser barata. Una cosa es que la
gasolina esté a buen precio y otra es que la regalen. El mejor ejemplo para
esto es el precio internacional de la gasolina: en Venezuela el litro de
gasolina cuesta 2,3 centavos de dólar, mientras que en promedio en los países
de la OPEP el precio ronda los 40 centavos de dólar: diecisiete (17) veces más.
Después de nuestro país
seguía Irán con el precio más barato de la gasolina pero allá la gasolina era
mucho más cara que aquí,38 centavos de dólar y algo que es importantísimo
mencionar: el gobierno amigo de
Ahmanidejad está emprendiendo una reforma agresiva de todos los subsidios de la
economía Iraní, entre ellos el de la
gasolina y en cinco (5) años esperan desmontarlo. Esta reforma le ha permitido
al gobierno Iraní ahorrar, hasta el momento,
cinco mil trescientos (5300) millones de dólares, de los cuales
ochocientos ochenta (880) millones provienen del aumento del precio de la
gasolina.
Con la gasolina pasa lo mismo
que con la educación superior, beneficia en mayor medida a los que pueden
pagar, sin embargo, la educación superior es otro tema y termina siendo mucho
más justificable que la gasolina. Es muchísima la gente de bajos recursos que
en nuestro país ha podido forjarse un futuro porque estudió en una universidad
pública, de eso no hay duda.
Aumentar el precio de la gasolina en nuestro país es
un mito y es un tema que el próximo gobierno, cualquier sea su tendencia, debe
atacar. Está claro que la solución no es aumentar el precio y ya, se necesita
un programa integral que involucre el tema de la infraestructura vial y de
transporte, sin eso, cualquier aumento de la gasolina fracasará. Para que esto
no ocurra, además se debe generar confianza en la población sobre lo que se
realizará con el ingreso proveniente del aumento en el precio de la gasolina.
Opciones hay muchas, el Estado Venezolano debe aproximadamente, diecinueve mil
(19000) millones en prestaciones sociales. Existe un déficit de escuelas
públicas de calidad, de primer nivel para que los niños tengan la mejor
educación posible. Las universidades tienen profesores en lista de espera para
salir al extranjero a realizar estudios de postgrado. Se necesitan más zonas
verdes en cada una de las ciudades del país, bibliotecas públicas de primer nivel
en las cuales los niños y la gente en general cultiven el amor por la lectura y
se hagan mejores ciudadanos. Entonces, hay razones para aumentar el precio de
la gasolina o ¿no?.
El gobierno ha tenido la
brillante idea de comenzar a pagar los pasivos laborales de la administración
pública con papeles. Cualquiera puede creer que no ingresó suficiente dinero al
país en estos casi catorce (14) años de gobierno. Hace unos meses escribí sobre
lo que significaría pagar las prestaciones sociales de los empleados públicos
con los denominados Petro-Orinocos. En esta oportunidad, escribiré de nuevo sobre
el tema porque no deja de ser una verdadera burla lo que el gobierno pretende
hacer con esos bonos.
Resulta que ante la incapacidad de cuantificar
la deuda, el gobierno se dispone a pagar el trabajo de toda una vida con un
papel (bono denominado Petro-Orinoco), que en el mejor de los casos rendirá 18
% anual (en bolívares) y que deberá esperar un (1) año para transarlo en la
bolsa pública de valores, sin embargo, el Comandante-Presidente dio la
autorización para canjear inmediatamente los papeles en el banco de Venezuela,
en este sentido, todavía no queda claro cómo funcionará el mecanismo.
La semana pasada se hizo el
primer pago con este instrumento a varios profesores universitarios, sería
bueno saber que piensan los “beneficiados” al respecto. El mecanismo en
términos sencillos es el siguiente: las deudas que tiene el Estado venezolano
desde hace muchos años, las cancelará este gobierno con un papel denominado en
bolívares que equivale al monto de sus prestaciones, muy parecido a un vale ó
un ticket de caja. Usted si quiere disfrutar de ese vale, tendrá que esperar un
año para poderlo vender en la bolsa de valores y a un precio por debajo de lo
que vale hoy, es decir, que todo el mundo recibirá menos por sus prestaciones
sociales. En el transcurso, se generarán intereses que serán pagaderos de
acuerdo a como lo establezca el gobierno. En este sentido, no hay obligación de
vender el Petro-Orinoco, se puede quedar con él para recibir los intereses, la
pregunta es ¿Quién se sentará a esperar por los intereses?, todo el mundo
quiere su dinero y para eso tendrán que salir a vender el bono, de lo
contrario, recibirán solo intereses.
Cuando un inversionista
compra bonos, lo hace porque cree que merece la pena el rendimiento que
ofrecerán y con base en eso genera un portafolio de inversión, eso es lógico.
Lo que es completa y absolutamente ilógico es que las prestaciones sociales de
un trabajador se pague con un bono que como todos sabemos se negociará en el
mercado y su valor no será del 100%.Por otra parte, el interés que paga (18%)
podría ser interesante pero al estar denominado en bolívares pierde cualquier
atractivo, esto quiere decir que tus prestaciones, si no vendes el bono se
convertirán en una cuenta de ahorros que pagará 18 % anual y estando en una
economía inflacionaria y de tasas reales negativas, el panorama no es del todo
alentador. Sacando cuentas, a mucha gente le podría parecer beneficioso, pero
recuerden: es el trabajo de toda una vida el que estarán pagando y para recibir
esos intereses debes mantener el bono, de lo contrario, si lo vendes por
completo, obviamente, no recibirás ningún tipo de interés. ¿Cómo se sentirá una
persona que trabajó al menos veinticinco (25) años para el Estado venezolano y
le paguen de esta forma?
Desde el gobierno reconocen
su incapacidad para calcular el monto total de la deuda, con decir que es
impagable se dan por satisfechos. Algunos cálculos arrojan 19 000 millones de
$, eso equivale aproximadamente a un año y medio de subsidio a la gasolina,
para que tengan una idea. En un país con tantos recursos y con toda la cantidad
de dinero que ha ingresado con el boom petrolero, el petro-orinoco no deja de
ser una bofetada y una burla a los trabajadores del sector público venezolano.
Quien esté de acuerdo que lance la primera piedra y explique ¿por qué es la
mejor opción para el trabajador? Queda claro que para el gobierno lo es y quien
pida su dinero en un cheque, será catalogado de burgués porque eso de trabajar
por dinero, definitivamente es una desviación burguesa.
Venezuela ocupa el puesto
177 entre 183 economías en lo referente a las facilidades para hacer negocios
en el mundo, es decir, las regulaciones existentes que permiten abrir una
empresa en el menor tiempo posible. Respecto al año anterior desmejoró dos (2)
posiciones. Para establecer formalmente una empresa en el país, se necesitan
141 días, mucho más que los necesarios en Nueva Zelanda (1), Georgia (2) y Hong
Kong (3).En Chad y Etiopía se necesitan menos días para formalizar una empresa,
(9) y (66) respectivamente.
Nuestro país ocupa el lugar
174 entre 184 economías respecto a la libertad económica de los países,
superando solo a Eritrea, Libia, Cuba, Zimbabue y Corea del Norte. Venezuela es
catalogada como una economía reprimida y países como Costa de Marfil, Gabon,
Honduras, Siria, Tonga y Uganda, por mencionar unos pocos, tienen mayor
libertad económica que nosotros. No en vano en estos países formalizar una empresa
tarda menos días que aquí (Siria no forma parte de la muestra para el índice
facilidades para hacer negocios)
En los indicadores de
gobernabilidad mundial, en lo referente a la “calidad regulatoria”, Venezuela
solo supera a ocho (8) países: Corea del Norte, Eritrea, Irán, Myanmar, R.D del
Congo, Somalia, Turkmenistan y Zimbabue. Un dato interesante es que Cuba
obtiene mejor resultado que Venezuela. En el índice de “efectividad
gubernamental”, el 85% de los países de la muestra obtiene mejor resultados que
nosotros.
En el índice de percepción
de la corrupción ocupamos el puesto 172 entre 183 economías, superando solo a
Haití, Irak, Sudan, Turkmenistan, Uzbekistan, Afghanistan, Myanmar, Corea de
Norte y Somalia. Cualquier otro país que se le venga a la mente presenta menores
niveles de corrupción que el nuestro. Un dato curioso es que la percepción de
la corrupción en el país ha empeorado después de la implementación de la ley
contra la corrupción en el año 2003.A todas luces una gran contradicción.
La inversión extranjera
directa se encuentra en mínimos históricos y para el año 2010 los flujos de
inversión presentaron niveles similares a Barbados, Belize, Dominica, El
Salvador, Grenada y las otras islas del Caribe, mientras que Argentina,
Colombia y Perú presentan niveles entre
5 y 9,9 billones de dólares.
Como se puede observar la
situación económica e institucional del país deja mucho que desear, por más que
se intente buscar un buen resultado, es poco lo que se puede hacer. Hoy
Venezuela presenta el mayor retroceso de país alguno en América latina en
materia económica e institucional. La ilusión monetaria que existe por la
cantidad de dinero que en la calle es dañina para la sociedad, el modelo es
insostenible y a pesar que en este país se hace dinero muy rápido y de manera
fácil, esto no ayuda a garantizar la estabilidad económica y mucho menos la
institucional. Hoy más que nunca nuestra economía presenta distorsiones y
asimetrías nunca antes vistas y eso, por más que sea llover sobre mojado, es
doloroso.
No deja de ser una
irresponsabilidad suprema que la única fuente de ingreso considerable en
nuestro país sea el petróleo y aprovecharse de esa coyuntura para generar un
modelo importador que beneficia a unos pocos, consolidando las ya existentes
instituciones extractivas que han hecho de nuestro país una sociedad desigual.
Urge un cambio de visión en
lo económico y en lo institucional, más allá de los resultados electorales es
necesario entender la realidad de nuestro país y detenerse a pensar que por la
vía que vamos no llegaremos a donde creemos, por el contrario, podría ser mucho
peor y con consecuencias nefastas en el largo plazo. Lamentablemente nuestro
país lo tiene todo, sin embargo, ha sido dirigido de una manera errática. De
ser un país con oportunidades de desarrollo nos hemos convertido en una “hacienda”
que dirige un “capataz” con mucho dinero a la que todo el mundo viene a buscar
su parte y así no se llega a ningún lado.
El Banco Central de Venezuela dio a conocer los
resultados del Índice Nacional de Precios al Consumidor del mes de julio. El
resultado fue de 1,0 %, menor al del mes anterior: 1,4% y menor a la de julio
del año pasado, 2,7%. La variación anualizada se ubica en 19,4%, inferior a la presentada en julio de 2011 que
fue de 25,1%. La variación anualizada a julio de este año representa la variación
más baja desde que se calcula el índice a nivel nacional. En términos
acumulados, la inflación para los primeros siete (7) meses del año se ubica en
8,6%, la más baja para dicho período desde que se calcula el INPC.
De
las trece (13) categorías que conforman el INPC, siete (7) mostraron una variación
mayor al promedio del mes: Bebidas alcohólicas y tabaco (2,2%), Esparcimiento y cultura
(1,2%)Restaurantes y hoteles (1,1%), Salud (1,6%), Servicios de educación
(2,9%), Transporte (2,6%) y Vestido y calzado (1,2%).El
resto de agrupaciones presentan variaciones menores a la del mes. Por otra parte, cinco (5) categorias se desaceleraron,
siete (7) registran un comportamiento acelerado y una (1) mantiene el mismo
comportamiento respecto al mes de junio. Los que desaceleran son: Alimentos y
bebidas no alcohólicas (de 0,8% a 0,2%), servicios de la vivienda excepto
telefono (de 1,1% a (0,2)%), equipamiento del hogar (1,2% a 0,5%), transporte
(de 4,0% a 2,6%) y restaurantes y hoteles (de 2,7% a 1,1%). Las aceleraciones,corresponden
a: alquiler de vivienda (de 0,7% a 1,0%), bebidas alcohólicas y tabaco (de 1,2%
a 2,2%), bienes y servicios diversos (de 0,7% a 1,0%), comunicaciones (de 0,1%
a 0,2%), esparcimiento y cultura (de 0,6% a 1,2%), servicios de educación (de 0,8% a 2,9%), vestido
y calzado (de 0,8% a 1,2%).Por su parte salud se mantuvo en 1,6%.
Respecto
a las ciudades, dos (2) presentan una variación mayor al promedio del mes: Ciudad
Guayana (1,1%) y Maracay (1,9%).Por otra parte, dos (2) mostraron aceleración
respecto al mes previo: Barcelona-Puerto La Cruz (de 0,6% a 0,9%) y Maracay (de
1,4% a 1,9%).Ciudad Guayana mantuvo el mismo comportamiento (1,1%) y en las
restantes ocho (8) ciudades el comportamiento fue desacelerado.
Por
grupos, se tiene que servicios de educación fue el que mayor variación presentó
con 2,9%, superior a la variación presentada durante mes de junio de 0,8%. En
términos anualizados este grupo es el tercero con mayor variación: 25,7%,
detrás de restaurantes y hoteles: 26,6 % y bebidas alcohólicas y tabaco con 26%. En términos acumulados, bebidas alcohólicas y tabaco presenta la mayor
variación en lo que va de año con 15,6%. El grupo con menor variación
anualizada y acumulada es comunicaciones
con 4,9% y 1,5% respectivamente.
En cuanto a los vecinos de
la región se tiene que en Chile la inflación en julio fue de 0.0% y la
anualizada se ubica en 2,5%. En Colombia
fue -0,02% para julio, la anualizada es de 3,03% y la acumulada se ubica
en 1,98%.Para Ecuador los resultados arrojan 0,26% en julio, 5,09% la anualizada
y 2,67% la acumulada. En Perú fue de 0,09% en julio, 3,28% la anualizada y 1,62%
la acumulada.
Un resultado que no deja de
llamar la atención es que el índice de escasez de los bienes aumentó de 11,7% a
14,2%, es decir, hay mayor escasez pero la inflación sigue cediendo. Esto a
todas luces es “contra intuitivo”,
toda vez que en la medida que se genera escasez los precios aumentan, sin
embargo, es bueno resaltar que este índice se calcula para el área
metropolitana de Caracas solamente. Sigo insistiendo en que el comportamiento
de la inflación en lo que va de año no es sostenible y no significa una mejora
significativa, ni muchos menos que el gobierno le está ganado la “batalla a la inflación”.
Los
gobiernos venezolanos tienen una larga tradición de otorgamiento de subsidios,
ha sido la mejor forma de relacionarse con el electorado. Uno de los más
importantes ha sido el subsidio a la gasolina que en años de revolución ha
pasado a ser gratuita en términos reales.
El
actual gobierno ha diseñado una política de subsidios que ha permitido a las
clases desfavorecidas beneficiarse a sus anchas, es así como existe Mercal, Mi
Casa Bien Equipada, FarmaPatria, las areperas socialistas y el subsidio a la
vivienda, por mencionar algunos ejemplos. Para la clase media y pudiente
también el gobierno ha generado subsidios importantes como el control cambiario
y las emisiones de bonos, estos mecanismos de acceso a divisa barata terminan
actuando como subsidios, de la misma manera que el precio de la gasolina y la
educación gratuita. La distorsión que este tipo de subsidio genera es que lo
aprovecha el que más tiene, precisamente aquel para el que no fue ideado.
Esta
arquitectura de subsidios ha funcionado porque el precio del petróleo ha sido
alto en los últimos años, de lo contrario sería imposible mantener algo tan
grotesco como es la política de subsidios del actual gobierno. Afirmo que es
grotesco porque el subsidio a la gasolina es de las cosas más desproporcionadas
que puedan existir en nuestro país. Termina siendo un subsidio para las clases
más favorecidas porque finalmente son los que pueden optar a comprar un
vehículo. Es tan increíble lo de la gasolina que lo terminan pagando los
pobres, es decir, los que menos tiene terminan pagándole un subsidio a los que
más tienen y el transporte público en pésimas condiciones al igual que la
infraestructura vial.
Cuando
un subsidio tiene mucho tiempo de haber sido implementado, levantarlo es
complicado porque una vez que lo disfrutas te acostumbras y cuando te quitan el
helado de la boca te molestas. Por eso es que desmontar el control cambiario y
aumentar el precio de la gasolina es algo que debe hacerse con pinzas, en el
entendido, que un eventual gobierno de oposición tendría que tomar esas
acciones.
El
gobierno venezolano importa cualquier cantidad de alimentos para venderlos a
precios bajos y con eso cree que hace la mejor de las políticas públicas. Mejor
sería producir alimentos en el país y que las condiciones permitan a los empresarios
generar empleos bien remunerados para que así la gente no tenga que depender de
un subsidio, en cualquiera de sus variantes.
En la
Venezuela revolucionaria la dependencia del ciudadano con el Estado se hace más
estrecha en la medida que existan más subsidios y “ayudas sociales” como ellos
las denominan. La verdad no me opongo que los gobiernos ayuden a los más
necesitados, eso sería criminal. A lo que me opongo es a utilizar los subsidios
como herramienta de control político, primero porque es miserable y segundo
porque es un mal negocio. El costo de oportunidad de mantener la estructura de
subsidios de la economía venezolana es muy alto. Solo piense en el monto del
subsidio anual a la gasolina, aproximadamente 4% del PIB.
Las
distorsiones generadas por los subsidios en nuestra economía son importantes,
por eso, urge replantear la política de subsidios y enfocarse en los que son
realmente importantes, entiendo que tienen que ser transitorios y no
permanentes como lo ha hecho el actual gobierno. Es importante entender que
detrás de cada subsidio que se implementa existen grandes negocios que
favorecen a grupos de presión que pugnan por hacerse de rentas importantes. El
daño que se le hace a la gente y al país con las grandes distorsiones que
presenta nuestra economía no se ve en este momento, sin embargo, en el largo
plazo se verán las consecuencias. Como reza el dicho “ no les des el pez enséñalos a pescar”, esa podría ser la mejor
manera de explicar cómo desmontar muchos de los subsidios que hoy tenemos.
El
19 de julio fue publicado en la Gaceta Oficial No. 39968 de
la República Bolivariana de Venezuela el Convenio Cambiario Nº 20. Esta norma
viene a oxigenar (en la medida de lo posible) el mercado cambiario y sus
artículos más importantes son:
Artículo 1:“Las personas jurídicas no domiciliadas en el
territorio de la República Bolivariana de Venezuela, que participen en la
ejecución de proyectos de inversión pública estratégicos para el desarrollo de
la economía nacional y de estímulo a la oferta productiva, podrán mantener en
cuentas en bancos universales regidos por el Decreto con Rango, Valor y Fuerza
de Ley de Reforma Parcial de la Ley de Instituciones del Sector Bancario,
fondos provenientes del exterior en moneda extranjera, a efecto de lo cual, las
mencionadas instituciones bancarias quedan autorizadas a recibir dichos
depósitos, en cuentas a la vista o a término, los cuales podrán movilizarse
mediante retiros totales o parciales en moneda de curso legal en el país, al
tipo de cambio vigente, o mediante transferencia o cheque del banco depositario girado contra sus corresponsales en el
exterior”
Artículo 2:“Las personas naturales mayores de edad
residenciadas en el territorio nacional y las personas jurídicas domiciliadas
en el país, podrán mantener en cuentas a la vista o a término en bancos
universales regidos por el Decreto con Rango, Valor y Fuerza de Ley de Reforma
Parcial de la Ley de Instituciones del Sector Bancario, fondos en moneda
extranjera provenientes, entre otros de carácter lícito, de la liquidación de
títulos denominados en moneda extranjera emitidos por la República Bolivariana
de Venezuela y sus entes descentralizados, o por cualquier otro ente,
adquiridos a través del Sistema de Colocación Primaria de Títulos en Moneda
Extranjera (SICOTME) o del Sistema de Transacciones con Títulos en Moneda
Extranjera (SITME), administrados por el Banco Central de Venezuela, a efecto
de lo cual, las mencionadas instituciones bancarias quedan autorizadas a
recibir dichos depósitos”
Artículo 4: “Las
empresas del Estado que obtengan divisas producto de su actividad exportadora,
podrán destinar hasta el cinco por ciento (5%) del saldo promedio mensual que
mantengan en cuentas en moneda extranjera autorizadas por el Directorio del
Banco Central de Venezuela, a la adquisición en los mercados financieros
internacionales de títulos emitidos en divisas por la República o sus entes
descentralizados, a los efectos de ser negociados en bolívares, a través del
Sistema de Transacciones con Títulos en Moneda Extranjera (SITME)”
La
implementación de estos tres (3) artículos “dinamizarían” el mercado cambiario,
principalmente a través del Sistema de Transacciones con Títulos en Moneda
Extranjera (SITME) porque PDVSA será un actor importante a partir de este
convenio, el artículo 4 abre el espacio para que la estatal petrolera venda
divisas vía SITME y así la oferta pueda aumentar en el corto plazo, datos de la
firma Ecoanalítica, establecen que este mecanismo incrementará la oferta diaria
en aproximadamente 12 millones de $, lo que significaría 1 385 millones de $
para lo que resta del año.
Respecto a las
personas naturales, es una buena noticia que puedan mantener saldos en moneda
extranjera en cuentas a la vista, sin embargo, no creo que sean las más
beneficiadas con el convenio. Igual recomendaría ir a su banco para conocer bien
cómo funciona el mecanismo e intentar utilizar esa opción, siempre y cuando
esté dentro de sus posibilidades. El nuevo convenio cambiario supone una
flexibilización importante para las empresas que serán las principales
beneficiadas con la norma, esperemos que funcione bien y no se convierta en un
cuello de botella más a los que nos tiene acostumbrado el gobierno. Finalmente
no deja de ser contradictorio que asuman una medida como esta, después de haber
cerrado las casas de bolsa. Esto ratifica, por ejemplo, que el caso Econoinvest
es un capricho y no ajustado a derecho. Tengan eso siempre presente.
Mi artículo de hoy es una análisis muy sencillo sobre la situación de la delincuencia en el país, basado lamentablemente en una experiencia vivida recientemente:
Aproximadamente en 1866-1867 Fiódor Dostoyevski escribió la que muchos analistas consideran la novela más influyentes de la literatura rusa: Crimen y Castigo. Este mismo título sirvió para que Gary Becker, premio Nobel de economía 1992, publicara en 1968 el artículo seminal de lo que hoy se denomina como “análisis económico del crimen”. El título exacto es “Crimen y castigo: un enfoque económico”.
Aproximadamente en 1866-1867 Fiódor Dostoyevski escribió la que muchos analistas consideran la novela más influyentes de la literatura rusa: Crimen y Castigo. Este mismo título sirvió para que Gary Becker, premio Nobel de economía 1992, publicara en 1968 el artículo seminal de lo que hoy se denomina como “análisis económico del crimen”. El título exacto es “Crimen y castigo: un enfoque económico”.
El argumento básico de Becker es que la criminalidad
es una actividad económica sujeta a análisis costo-beneficio por parte de los
delincuentes, lo que implica que estos sean racionales porque maximizan los
resultados de la actividad criminal. En este sentido, la criminalidad está
asociada a los costos de captura y condena, a la oferta de delitos y a los
posibles castigos, esto quiere decir: el crimen depende de los incentivos que
el sistema legal de determinado país ofrece para que los delincuentes actúen en
consecuencia. Si es muy barato delinquir (fácil) existirán incentivos a
realizar dicha actividad, si por el contrario, es muy costoso (difícil) porque
la probabilidad de captura del delincuente es alta, los incentivos para
realizar dicha actividad son menores.
Desde este punto de vista, la impunidad se explica
fácilmente: si 9 de cada 10 delitos no se resuelven, la señal que se envía a
los delincuentes es: “dale que no viene
carro”. Esto es lo que ocurre actualmente en el país: delinquir es muy
barato porque el principal costo (que te capturen) es prácticamente cero. Las
implicaciones que tiene este sencillo análisis para la formulación de políticas
públicas es muy importante: los delitos deben hacerse más costosos, de lo
contrario no disminuirán.
Los niveles de criminalidad que exhibe Venezuela
permiten pensar que el sistema de justicia no funciona y por lo tanto abarata
los costos de cometer delitos. ¿Cuántas
personas no ha escuchado usted que han sido víctimas de la delincuencia
recientemente? , muchísimas y todo indica que no se está haciendo nada para
resolver ese grave problema que aqueja a todos los venezolanos, sin distingo de
clase. Por supuesto, si tiene guardaespaldas es mucho menos probable que te
ataquen y se han visto casos.
La semana pasada fuimos víctimas de un atraco a las
9 30 am y bastaron 2 minutos para que un pelao de 19 años, aproximadamente, despojara
a 12 personas de todas sus pertenencias mientras desayunábamos para ir a la
playa. Solo quien pasa por tan desagradable episodio sabe lo que se siente y lo
que significa verse sometido por el hampa sin poder hacer absolutamente nada.
Los costos para quienes nos robaron eran
inexistentes: se bajaron de una moto en plena vía pública y en muy poco tiempo
salieron ilesos de la operación. Los beneficios, por el contrario, eran
sustanciales porque poca gente va a la playa sin dinero y sin accesorios
personales.
Lamentablemente, en la actualidad no existe en el
país un sistema de premios y castigos que permita a los delincuentes dedicarse
a otras actividades. Mientras la impunidad sea la norma difícilmente las cosas
cambien en materia criminal. El atraco es el pan nuestro de cada día, debes
conformarte con el consuelo: “gracias a
Dios no paso nada, ha podido ser peor”. Las implicaciones económicas de la
criminalidad desbordada se reflejan en la inversión y el sector turismo es uno de los
más afectados.
Una gestión municipal ó regional que no pueda con el tema de la
delincuencia, está condenada al fracaso: si las probabilidades de ser víctimas
del hampa son altas, ¿Quién va de turista?, ¿Quién invierte su dinero en una
plaza tan insegura?. Altas tasas de criminalidad generan desconfianza en los
inversionistas y consumidores. Si el compromiso que los gobernantes asumen para
atacar el problema no es creíble, difícilmente pueda mejorar la situación y
generarse la confianza necesaria para estos casos. Todo indica que hace falta “voluntad política” pero como este es un
país petrolero, no importa, si nos roban, lo volvemos a comprar “pa´eso hay bastante rial…..”
Hace un par de semanas se
decidió la entrada plena de Venezuela al Mercosur y será formalizada el 31 de
julio en una reunión extraordinaria en Brasil. La noticia ha alegrado a las
filas del gobierno porque sin ninguna duda lo mostrarán como un logro, sin
embargo, hay mucha tela que cortar sí queremos analizar la decisión. Desde la
forma en que se gestionó su entrada hasta lo que económicamente implica para
nuestro país.
Todo indica que la decisión
de aceptar a Venezuela en el Mercosur es legal pero lo que no queda claro es si
es legítima, pues debieron suspender a Paraguay por los problemas políticos que
presenta para que el ingreso de Venezuela se materializara. Es importante
recordar que el Senado Paraguayo estaba en contra del ingreso de nuestro país
al bloque subregional. Genera mucha suspicacia que solo con la suspensión de
Paraguay haya sido posible la entrada de Venezuela. Por la medida chiquita, nuestro
país entra por lo puerta trasera, es como si, usted asista sin estar invitado
al matrimonio de alguien que conozca y además se tome fotos con los novios para
que las coloquen en el álbum de la boda.
Respecto al impacto
económico de pertenecer al Mercosur, se debe tener claro que este es el peor
momento de la economía nacional para hacer frente a semejante reto. Al lado de
Brasil y Argentina, nuestro país no tiene absolutamente nada que ofrecer en el
corto y mediano plazo, mientras que ellos si tienen que ofrecernos y mucho.
Para ellos somos un muy buen negocio porque expandimos sus posibilidades de
exportación pero nosotros ¿qué le podemos vender?, ¿Cómo puede un empresario
venezolano ser competitivo en el extranjero con un tipo de cambio como el
actual?, ¿Cómo ser competitivo con el grave problema eléctrico que presenta el
país?.La realidad de la economía venezolana revela que muchas empresas han
dejado de producir para convertirse en distribuidores porque ese es mejor
negocio.
Con las
actuales condiciones de la economía venezolana me imagino que algunas de las
cosas que se podrían ofrecer al Mercosur son: artesanos de Cuyagua podrán
exhibir sus piezas en las playas de Rio de Janeiro. Las conservas de coco de
Choroní se podrían enviar a Montevideo. Existiría una extraordinaria
oportunidad de negocio con patacones congelados para microondas. Imagínense
colocar en Punta del Este el popular “vuelve
a la vida, rompecolchón y espérame en el piso” en envases Premium. También
los vendedores venezolanos de lentes chinos podrían exportar “sus productos”. Las panelas de San
Joaquín serían un éxito e incluso el gobierno podría exportar “combos para marchas” y así promover la
participación política.
Las asimetrías económicas
respecto a Brasil y Argentina son significativas y en las actuales condiciones
celebrar la entrada de nuestro país al Mercosur no deja de ser una
irresponsabilidad. En el corto plazo, será negocio para Brasil, Uruguay y
Argentina y para los grupos cercanos al gobierno que tengan acceso a dólares
baratos, se convertirá en un mecanismo institucional de extracción en
detrimento del aparato productivo nacional.
Mucha gente verá como
positiva la entrada de marcas brasileras y argentinas pero en el fondo eso le
hace un gran daño a los empresarios nacionales porque no tendrán la misma
posibilidad de colocar sus productos en esos países porque no son competitivos.
Falta mucho por avanzar para que la entrada de Venezuela al Mercosur genere
frutos, con el actual modelo económico no hay nada que buscar en el bloque
subregional. Mientras tanto los empresarios brasileros se frotan las manos,
pues, el gobierno venezolano decidió ser el patio de Brasil y no de los Estados
Unidos de Norteamérica que no es lo mismo pero es igual, espero que ahora
entiendan cuando Lula le dijo al Comandante-Presidente: “tu victoria será nuestra victoria”. Preparémonos para la invasión
amazónica.
El Banco Central de Venezuela dio a conocer los
resultados del Índice Nacional de Precios al Consumidor del mes de junio y por
lo tanto del primer semestre del año. El resultado fue de 1,4 %, menor al del
mes anterior: 1,6%. La variación anualizada se ubica en 21,3%, inferior a la presentada en junio de 2011 que
fue de 23,6%. La variación anualizada a junio de este año representa la variación
más baja desde que se calcula el índice a nivel nacional. En términos
acumulados, la inflación para el primer semestre del año se ubica en 7,5%, la
más baja para dicho período desde que se calcula el INPC.
De
las trece (13) categorías que conforman el INPC, tres (3) mostraron una
variación mayor al promedio del mes: salud
(1,6%), restaurantes y hoteles (2,7%) y transporte (4,0%).El resto de
agrupaciones presentan variaciones menores a la del mes. Por otra parte, seis (6) categorias se desaceleraron y
seis (6) registran un comportamiento acelerado respecto al mes de mayo. Los que
desaceleran son: Alimentos y bebidas no alcohólicas (de 1,7% a 0,8%), alquiler
de vivienda (de 1,1% a 0,7%), comunicaciones (de 0,3% a 0,1%), esparcimiento y
cultura (de 0,7% a 0,6%), salud (de 2,2%
a 1,6%), y servicios de la vivienda (de 1,5% a 1,1%). Las aceleraciones,corresponden
a: Bebidas alcohólicas y tabaco (de 1,0% a 1,2%), equipamiento del hogar (de 0,6%
a 1,2%), restaurantes y hoteles (de 2,6% a 2,7%), servicios de la vivienda (de 0,5%
a 0,8%), transporte (de 2,0% a 4,0%) y vestido y calzado (de 0,7% a 0,8%), por
su parte bienes y servicios diversos se mantuvo en 0.7%.
Respecto
a las ciudades, cuatro (4) presentan una variación mayor al promedio del mes:
Barquisimeto (2,4%), Caracas (1,5%), Maracaibo (2,1%) y Maturín (1,8%). Por
otra parte, sólo Barquisimeto mostró aceleración respecto al mes previo (de
1,3% a 2,4%), en ocho (8) ciudades el comportamiento fue desacelerado: Caracas
(de 1,6% a 1,5%), Ciudad Guayana (de 1,2% a 1,1%), Barcelona-Puerto La Cruz (de 1,1% a 0,6%),
Maracay (de 1,9% a 1,4%), Mérida (de 1,4% a 1,0%), San Cristóbal (de 1,4% a
1,2%),Valencia (de 1,9% a 1,2%) y Resto Nacional (de 1,4% a 1,2%). Maracaibo y
Maturín mantuvieron las tasas del mes de mayo:2,1% y 1,8% respectivamente.
Por
grupos, se tiene que restaurantes y hoteles fue el que mayor variación presentó
con 2,7%, superior a la variación presentada durante mes de mayo de 2,6%. En
términos anualizados este grupo es el que mayor variación presenta con 28 %, en
términos acumulados, bebidas alcohólicas y
tabaco presenta la mayor variación en lo que va de año con 13,1%. El grupo
con menor variación anualizada y acumulada es
comunicaciones con 5,2% y 1,2% respectivamente.
En cuanto a los vecinos de
la región se tiene que en Chile la inflación en junio fue de -0,3% y la
anualizada se ubica en 2,7%. En Colombia
fue 0,08% para junio, la anualizada es de 3,20% y la acumulada se ubica
en 2,01%.Para Ecuador los resultados arrojan 0,18% en junio, 5,00% la
anualizada y 2,40% la acumulada. En Perú fue de -0,04% en junio, 4,00% la
anualizada y 1,53% la acumulada. En Uruguay 0,30% para el mes de junio, 4,13 %
acumulada y 8,00 % en los últimos 12 meses.
Los resultados del primer
semestre revelan que en efecto es la inflación más baja desde que el INPC
comenzó a medirse, sin embargo, el comportamiento del grupo alimentos y bebidas
no alcohólicas muestra la segunda mayor variación con 27,2%, este dato es
importante porque un alto porcentaje de la población gasta la mayoría de sus
ingresos en alimentos y sabemos que es insostenible el modelo de “subsidio a la importación” vía dólares
preferenciales que el gobierno lleva
acabo. Por otra parte, el alcance de la Ley de Costos y Precios Justos
es limitado y la dinámica de los salarios permite pensar que la inflación está
“represada”. Esperemos, pues, que en
efecto la inflación ceda pero nada indica que eso esté sucediendo. La coyuntura
permite pensar ilusamente que la inflación mejora, sin embargo, es solo eso:
coyuntura, nada estructural.
Una introducción muy muy básica al tema institucional con breve referencia al caso venezolano,es vital hacer la reflexión al respecto.Mi artículo de hoy en el diario Notitarde:
Uno de los temas más
importantes estudiados durante los últimos quince (15) años en temas de
desarrollo económico es el de la persistencia institucional y como nuestro
pasado podría determinar lo que hoy somos como nación y como sociedad,
específicamente, el origen de nuestras instituciones como determinante del
desempeño económico actual. Toda teoría que intente explicar el proceso de
desarrollo institucional de los países necesita desarrollar y relacionar los
conceptos de instituciones económicas e instituciones políticas para luego
incorporar el papel de las élites en el análisis. En este sentido, las élites
tienen un rol importante siempre que se intente generar una teoría de las
instituciones.
De acuerdo a Acemoglu y
Robinson, las instituciones económicas moldean los incentivos económicos,
mientras que el proceso político determina las instituciones económicas con las
que se desarrollan las sociedades, así las instituciones políticas determinan
la capacidad de los ciudadanos para ejercer control sobre los políticos. En
este sentido, las instituciones económicas determinan la prosperidad de los
países mientras que el proceso político y las instituciones que se generan en
él, determinan las instituciones económicas que cada país tendrá. Las
instituciones políticas determinan el tipo de instituciones económicas.
De esta forma, tanto las
instituciones económicas como las políticas pueden ser inclusivas o extractivas
y la interacción de estas a través de las diferentes élites que se erigen en el
proceso de desarrollo determina la prosperidad de una nación. En general, las élites buscarán su beneficio
particular a costa del bienestar colectivo, es así como la combinación de
instituciones económicas y políticas de orden extractivo generan desigualdad y
pobreza en lugar de prosperidad. En general la combinación de instituciones
inclusivas y extractivas es inestable en el tiempo, es por ello que muy
comúnmente se presentan los casos de instituciones económicas y políticas de
orden extractivo o de orden inclusivo de manera simultánea. Las instituciones
de tipo inclusivas reducen los beneficios de las elites “distribuyendo” el
poder de una manera plural y haciendo que la prosperidad llegue a mayor
cantidad de personas.
Los cambios institucionales
demoran años en ser llevados a cabo, sin embargo, son necesarios. Es así como
las instituciones que se originaron durante la colonia determinan el tipo de
instituciones económicas y políticas que hoy tenemos. No es lo mismo un proceso
de colonización extractivo que uno en el que se haya generado capital social. Siendo
Venezuela una economía rica en recursos minerales es lógico que la competencia
entre grupos de presión por hacerse de las rentas del Estado esté presente. Es
así como siempre intentarán capturar subsidios por más que se den golpes de
pecho por la libre empresa y el funcionamiento del mercado. Influirán en
decisiones de política económica para ser beneficiados o estarán pendientes de
tener contratos para garantizar su estabilidad en el mediano-largo plazo. En
esencia, el problema de los “empresarios y los políticos” en un país como el
nuestro es básicamente el mismo: garantizar su estabilidad y para ello generan
instituciones que les beneficien, independientemente del gobierno de turno.
En los últimos treinta (30)
años ha existido una institución de carácter extractivo que es vital para
explicar la dinámica económica del país: el control cambiario y en toda nuestra vida democrática, la figura del “contratista” es importantísima para
entender las relaciones de las élites con el Estado. Es así como a lo largo y
ancho de toda América latina grandes grupos empresariales y políticos han
vivido a la sombra de los diferentes gobiernos de turno; que se llamen “nuevos ricos”, “boliburgueses” o “cameleones”
es lo de menos, lo importante es entender la dinámica que hay detrás de todo el
proceso de extracción de rentas generado
desde la colonia y que hoy explica el tipo de economía que tenemos.
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