Mi artículo del hoy tiene que ver con la importancia de las instituciones para una economía.Academicamente es un tema bastante estudiado,sin embargo, parecería que en Venezuela mucha gente no lo tiene claro.La disucsión no es si este punto es importante, tendría que ser como emprender los cambios institucionales necesarios para que el país realmente progrese en todos sus ámbitos, los costos asociados a ello y sobre todo el tiempo que requeriría. ¿Estará la sociedad venezolana preparada para un verdadero cambio institucional?.
Para absolutamente nadie en este país es un secreto que en los últimos años -como nunca antes en nuestra historia democrática- se viene desarrollando el desmantelamiento del ya disminuido tejido institucional con el que contábamos como nación. Quien lo niegue, quiere tapar el sol con un dedo o sencillamente es ciego, igual lo invitaría a discutir en el auditorio de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales al respecto, las puertas están abiertas.
La importancia que tienen las instituciones para un país y específicamente para su economía ha sido demostrada por muchos economistas y politólogos de primer nivel en el mundo académico, de hecho, existe un consenso al respecto: las instituciones importan y mucho más de lo que los políticos creen. En una economía, fijar reglas de juego óptimas y que además perduren en el tiempo, vale acotar, que sean estables, genera confianza y credibilidad, por lo tanto esto atraerá inversión y generará empleo.
Lo que se ha visto en el país durante la última década es muestra del desprecio que un gran sector del país tiene hacia la vida ciudadana y el cumplimiento de la norma. Que un gobierno lidere un proceso de destrucción institucional es inconcebible (sólo en un esquema Marxista es una opción válida) pero que la gente lo siga y compre esa idea es peor aún porque quiere decir que le gusta esa forma de vida y ese estilo ramplón de gobernar. Entienden el problema en el que estamos metidos?
Cosas tan sencillas como no respetar el semáforo ó la cola del banco hasta la firma de acuerdos opacos con otros gobiernos como el chino, pasando por el caso de PUDREVAL, CADIVI y recientemente, el fondo de pensiones de PDVSA dan muestra de lo poco que se cuidan las "formas" y se irrespetan las normas en nuestro país. Desde hace muchísimo tiempo los ciudadanos no respetan las normas de convivencia en Venezuela, pero ahora es el gobierno el que no lo hace y además públicamente sin ningún pudor lo demuestra, se acuerdan del clásico: "María Isabel espérame en la casa que te voy a dar lo tuyo" ó más recientemente. "voy a llamar a la fiscal Luisa y le pediré ayuda en este caso…". Por otra parte, tenemos al diputado Robert Serra haciendo una investigación policial sobre el caso de la huelga de hambre de los estudiantes universitarios y consigue un supuesto financiamiento externo para los estudiantes de 49 200 dólares pero no dice nada del caso Illaramendi y el fondo de pensiones de PDVSA que asciende a 486 millones de dólares. Al respecto pregunto: ¿La estafa del fondo de pensiones de PDVSA no afecta a más familias que la estafa inmobiliaria?
El caso del famoso Fondo Chino es otro buen ejemplo de la des-institucionalización del país. La opacidad es la norma de dicho convenio, los venezolanos no sabemos absolutamente nada al respecto y para rematar el Dr. Giordani afirma que eso no es deuda. Lo preocupante de este caso, más allá de su poca transparencia, es su legitimidad: el actual gobierno compromete a la nación más allá de su permanencia en el poder. Una cosa es que el Presidente de la nación pueda reelegirse y otra muy distinta es que en efecto gane las elecciones si se presenta como candidato. La pregunta es ¿qué pasará con el fondo chino si en 2013 hay un nuevo gobierno en nuestro país?, ¿estaría obligado a pagar? Si se le toma la palabra al Dr. Giordani y como no es deuda no se paga. ¿Será que está mandando un mensaje?
Casos como los mencionados anteriormente hay muchísimos, piense usted en uno y verá que lo conseguirá. Un país difícilmente salga adelante sin una dotación institucional de calidad y en la actualidad eso lamentablemente no existe, es imposible que una nación avance con la aplicación del método "se me está ocurriendo en este momento que…", ningún país la ha logrado de esa forma y nosotros no tenemos por qué ser la excepción. Re institucionalizar el país es el gran reto en los próximos años, espero que así lo entienda el "establishment" criollo y rentista que tenemos, de lo contrario nada cambiará.
La importancia que tienen las instituciones para un país y específicamente para su economía ha sido demostrada por muchos economistas y politólogos de primer nivel en el mundo académico, de hecho, existe un consenso al respecto: las instituciones importan y mucho más de lo que los políticos creen. En una economía, fijar reglas de juego óptimas y que además perduren en el tiempo, vale acotar, que sean estables, genera confianza y credibilidad, por lo tanto esto atraerá inversión y generará empleo.
Lo que se ha visto en el país durante la última década es muestra del desprecio que un gran sector del país tiene hacia la vida ciudadana y el cumplimiento de la norma. Que un gobierno lidere un proceso de destrucción institucional es inconcebible (sólo en un esquema Marxista es una opción válida) pero que la gente lo siga y compre esa idea es peor aún porque quiere decir que le gusta esa forma de vida y ese estilo ramplón de gobernar. Entienden el problema en el que estamos metidos?
Cosas tan sencillas como no respetar el semáforo ó la cola del banco hasta la firma de acuerdos opacos con otros gobiernos como el chino, pasando por el caso de PUDREVAL, CADIVI y recientemente, el fondo de pensiones de PDVSA dan muestra de lo poco que se cuidan las "formas" y se irrespetan las normas en nuestro país. Desde hace muchísimo tiempo los ciudadanos no respetan las normas de convivencia en Venezuela, pero ahora es el gobierno el que no lo hace y además públicamente sin ningún pudor lo demuestra, se acuerdan del clásico: "María Isabel espérame en la casa que te voy a dar lo tuyo" ó más recientemente. "voy a llamar a la fiscal Luisa y le pediré ayuda en este caso…". Por otra parte, tenemos al diputado Robert Serra haciendo una investigación policial sobre el caso de la huelga de hambre de los estudiantes universitarios y consigue un supuesto financiamiento externo para los estudiantes de 49 200 dólares pero no dice nada del caso Illaramendi y el fondo de pensiones de PDVSA que asciende a 486 millones de dólares. Al respecto pregunto: ¿La estafa del fondo de pensiones de PDVSA no afecta a más familias que la estafa inmobiliaria?
El caso del famoso Fondo Chino es otro buen ejemplo de la des-institucionalización del país. La opacidad es la norma de dicho convenio, los venezolanos no sabemos absolutamente nada al respecto y para rematar el Dr. Giordani afirma que eso no es deuda. Lo preocupante de este caso, más allá de su poca transparencia, es su legitimidad: el actual gobierno compromete a la nación más allá de su permanencia en el poder. Una cosa es que el Presidente de la nación pueda reelegirse y otra muy distinta es que en efecto gane las elecciones si se presenta como candidato. La pregunta es ¿qué pasará con el fondo chino si en 2013 hay un nuevo gobierno en nuestro país?, ¿estaría obligado a pagar? Si se le toma la palabra al Dr. Giordani y como no es deuda no se paga. ¿Será que está mandando un mensaje?
Casos como los mencionados anteriormente hay muchísimos, piense usted en uno y verá que lo conseguirá. Un país difícilmente salga adelante sin una dotación institucional de calidad y en la actualidad eso lamentablemente no existe, es imposible que una nación avance con la aplicación del método "se me está ocurriendo en este momento que…", ningún país la ha logrado de esa forma y nosotros no tenemos por qué ser la excepción. Re institucionalizar el país es el gran reto en los próximos años, espero que así lo entienda el "establishment" criollo y rentista que tenemos, de lo contrario nada cambiará.